Sin duda alguna, el comercio electrónico gana protagonismo cada día en España. El crecimiento del ecommerce ha ido de la mano del desarrollo de nuevas soluciones tecnológicas, ya que ha sido precisamente esto lo que ha permitido su crecimiento exponencial.
Pues bien, el cloud computing ha sido uno de los últimos grandes aliados de este nuevo medio de ventas. Este presenta a su vez distintas variantes, que son la cloud pública, la cloud privada y la cloud híbrida. Veamos cuáles son sus principales ventajas.
No hay problema alguno cuando aumenta la demanda
Su flexibilidad y escalabilidad son algunos de los principales valores de la nube. Esta permite a las empresas afrontar el incremento de visitas y de la actividad de manera bastante más eficiente que a través de aplicaciones in-house, servidores o software propios.
Como no se encuentran restringidos en un solo servidor, los usuarios tienen la posibilidad de aumentar sus recursos en períodos de bastante trabajo. Estos recursos adicionales se pueden interrumpir una vez que los niveles de demanda vuelven a la normalidad.
Te ahorras costes
Lo normal a la hora de operar con las soluciones en la nube es hacerlo mediante un sistema de pago por uso, de forma que el cliente tan solo tiene que pagar por aquellos servicios que realmente utiliza.
Además no se exigen inversiones previas en hardware ni actualizaciones de software o mantenimiento, de manera que le funcionamiento del sistema interno es mucho más económico.
Gestionar la infraestructura en cloud puede llevar a una media de ahorro del 30% con respecto al modelo externalizado de arquitectura tradicional. Un porcentaje que puede llegar a duplicarse fácilmente según las especificaciones del proyecto.
Posibilidades a la hora de escoger
Gracias a la naturaleza misma del sistema de pago por uso de la nube, este es un recurso fácilmente accesible para todas las empresas, con independencia de cuál sea su tamaño. De forma que las más pequeñas pueden rivalizar con otras en teoría bastante más grandes.
Las soluciones cloud de hoy en día posibilitan que el comercio electrónico sea una opción asequible, y que los consumidores cuenten con más posibilidades entre las cuales elegir en el mercado online.
La seguridad está garantizada
En ocasiones, los efectos de la naturaleza pueden hacer que sea necesario cerrar un comercio o cortar el suministro del negocio. También pueden afectar al rendimiento de los servidores en los que se desarrolla la actividad online.
No obstante, la nube elimina todas estas eventualidades. El alojamiento de los servidores en espacios independientes del lugar físico y los elevados niveles de redundancia que ofrecen las empresas especializadas en cloud hacen que estos sigan funcionando como de costumbre, sin que los clientes noten que ha habido ninguna incidencia. Por otro lado, recursos como los sistemas de seguridad o el personal especializado de los proveedores garantizan la máxima disponibilidad de estas plataformas.
Todo se hace de forma rápida y sencilla
Las soluciones de cloud actuales ofrecen sistemas de control especialmente intuitivos y sencillos, que hacen que con solo unos cuantos clics se puedan dar de alta servidores, configurarlos, crear reglas de firewall, etc. Todo ello de manera prácticamente automática, dado que las implantaciones son inmediatas y más fáciles de gestionar por parte de los departamentos técnicos.
